Las cooperativas tienen la misión de erradicar la pobreza y la única manera de lograrlo es generando riqueza lo cual se logra fomentando el crecimiento, desarrollo y consolidación de la cooperativa.
Mucho han cambiado las cooperativas desde su nacimiento hace más de 70 años, inicialmente los colaboradores o empleados de la cooperativa eran todos voluntarios y en América Latina en la década de los 70’s del siglo pasado se incorporó la figura de gerente en la cooperativa como una persona que ganaba un salario y de esa manera las cooperativas empezaron una etapa de crecimiento, desarrollo y consolidación.
En su momento, esta decisión fue muy polémica, no faltaron los cooperativistas que se rasgaron las vestiduras diciendo que esta estrategia desvirtuaba al cooperativismo, la realidad es que en esta época muchas cooperativas desaparecieron por no implementar la contratación de empleados y pagarles un salario; las cooperativas que lo hicieron iniciaron una etapa de crecimiento y desarrollo y los socios o asociados de la cooperativa obtuvieron una solución a los problemas que los llevaron a afiliarse a la cooperativa.
En la actualidad, como en el siglo pasado, un colaborador o empleado de la cooperativa, debe generar un valor significativo para su cooperativa lo cual puede lograrse de diversas maneras, contribuyendo al crecimiento, eficiencia y sostenibilidad de la cooperativa, lo que se convierte en un gran beneficio para los socios quienes de esa manera tienen mayores alternativas para tener u mejor futuro.
Dado que las cooperativas son entidades que se caracterizan por la participación activa de sus miembros y empleados en la toma de decisiones, cada acción individual puede tener un impacto considerable en la comunidad y en el éxito general de la cooperativa, por lo que es importante que en la cooperativa se incentiven estas sanas prácticas, donde destacan las siguientes:
Mejorando la eficiencia operativa
Optimización de procesos: Identificar áreas de mejora en los procesos operativos cotidianos y proponer soluciones o ajustes para optimizar el uso de recursos, reducir costos y aumentar la productividad.
Uso eficiente de recursos: Ser consciente del uso de recursos (materiales, tiempo, energía) y buscar maneras de utilizarlos de manera más eficiente, promoviendo la sostenibilidad.
Participación activa y compromiso
Toma de decisiones: Al participar en reuniones de trabajo y comités, los empleados tienen la oportunidad de influir en las decisiones estratégicas de la cooperativa.
Propuesta de ideas: Las ideas innovadoras de los empleados pueden impulsar el crecimiento y la mejora continua de la cooperativa.
Compromiso con los valores: Al alinear sus acciones con los valores cooperativos de solidaridad, autogestión y responsabilidad social, los empleados fortalecen la identidad y la reputación de la cooperativa.
Participando activamente en la toma de decisiones
Propuesta de ideas e innovaciones: Aportar ideas y propuestas innovadoras en reuniones, asambleas y otros espacios de participación, contribuyendo a mejorar productos, servicios o procesos internos.
Impulsar la democracia interna: Participar activamente en la toma de decisiones colectivas, garantizando que la voz de los empleados sea escuchada y que las decisiones reflejen los intereses comunes.
Desempeño laboral de excelencia
Producción de bienes o servicios de calidad: La calidad de los productos o servicios ofrecidos por la cooperativa es fundamental para su éxito.
Eficiencia y productividad: Al optimizar los procesos y maximizar los recursos, los empleados contribuyen a la rentabilidad de la cooperativa.
Orientación al cliente: Un excelente servicio al cliente fomenta la lealtad y atrae nuevos socios.
Desarrollo de habilidades y conocimientos
Formación continua: Al invertir en su desarrollo profesional, los empleados aumentan su valor para la cooperativa y contribuyen a su crecimiento.
Transferencia de conocimientos: Compartir conocimientos y experiencias con otros compañeros fortalece el equipo y mejora la productividad.
Fortalecimiento de la comunidad cooperativa
Colaboración con otros socios: Al trabajar en equipo y construir relaciones sólidas con otros socios, los empleados fortalecen el tejido social de la cooperativa.
Promoción de los valores cooperativos: Los empleados pueden ser embajadores de la cooperativa en su comunidad, promoviendo los principios cooperativos y generando un impacto positivo en la sociedad.
Fomentando la cultura cooperativa
Promoción de valores cooperativos: Ser un embajador de los principios y valores cooperativos, como la solidaridad, la equidad, la responsabilidad y la ayuda mutua, tanto dentro como fuera de la cooperativa.
Fortalecimiento del sentido de comunidad: Crear un ambiente de trabajo inclusivo y colaborativo, facilitando la integración de nuevos empleados y promoviendo un espíritu de cooperación y apoyo mutuo.
Desarrollando habilidades y capacidades
Capacitación y educación continua: Participar en programas de formación y desarrollo para mejorar habilidades técnicas, de liderazgo, y conocimientos específicos que sean útiles para la cooperativa.
Compartir conocimientos y experiencias: Transmitir los conocimientos adquiridos a otros empleados y miembros de la cooperativa, fomentando el aprendizaje colectivo y el desarrollo de capacidades internas.
Aportando al crecimiento financiero
Generación de nuevos negocios o proyectos: Proponer y liderar iniciativas que generen ingresos adicionales o que diversifiquen las fuentes de financiamiento de la cooperativa.
Atención al cliente y miembros: Brindar un excelente servicio al cliente y atención a los miembros, asegurando su satisfacción y fidelidad, lo que puede llevar a un aumento de la base de miembros o clientes.
Innovando en Productos y Servicios
Desarrollo de nuevas soluciones: Participar en la creación o mejora de productos y servicios que respondan a las necesidades cambiantes de los miembros y clientes de la cooperativa.
Implementación de tecnologías: Proponer e implementar nuevas tecnologías o herramientas digitales que mejoren la calidad de los productos o servicios ofrecidos.
Promoviendo la sostenibilidad
Prácticas sostenibles: Aplicar y promover prácticas sostenibles en todas las actividades laborales, como la reducción de residuos, la eficiencia energética, y el uso responsable de los recursos.
Conciencia ambiental: Educar y sensibilizar a otros empleados y miembros sobre la importancia de la sostenibilidad y cómo cada acción contribuye al bienestar colectivo y del medio ambiente.
Fortaleciendo la Comunicación Interna y Externa
Mejorar la comunicación: Fomentar una comunicación clara y efectiva entre los diferentes niveles de la cooperativa, asegurando que la información relevante llegue a todos los miembros y empleados.
Representación de la cooperativa: Representar a la cooperativa de manera positiva en el entorno local, participando en eventos comunitarios, foros, y actividades de networking que fortalezcan la reputación de la cooperativa.
Apoyando en la Gestión del Cambio
Facilitación de cambios organizacionales: Colaborar en la implementación de cambios estratégicos o estructurales, actuando como agente de cambio y apoyando a otros empleados en el proceso de adaptación.
Feedback constructivo: Proporcionar retroalimentación constructiva sobre las iniciativas de cambio y proponer ajustes que puedan mejorar la efectividad de la implementación.
Fomentando la inclusión y diversidad
Crear un entorno inclusivo: Promover un ambiente laboral donde todas las voces sean escuchadas y respetadas, y donde todos los empleados se sientan valorados y comprometidos.
Integración de diversidad: Participar en iniciativas que fomenten la diversidad y la inclusión, contribuyendo a un entorno de trabajo más dinámico y enriquecedor.
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